Septiembre 2011
El año anterior no había llegado a hacer el tradicional paseo a Ven, que con pocas excepciones hacíamos año tras año, y cuando vi que el domingo 4 de septiembre iba a ser un lindo día les propuse a Johanna y Viktoria hacer la excursion. KF no podía a causa de sus estudios.
Salimos bastante temprano de Malmö para llegar a tomar al ferry de las diez, que salía de la nueva terminal en Landskrona, no muy lejos de la antigua pero mucho más moderna y cómoda. Donde estacionamos el auto vimos varios montoncitos de vidrios rotos, señal de que no era lugar seguro para dejar el auto, pero no teníamos mejor opción. Además no dejamos nada de valor a la vista. Había como siempre bastante gente a bordo, especialmente siendo un día tan lindo, pero pudimos encontrar lugar para sentarnos afuera al sol durante el cruce.
Cuando nos hicimos de las bicicletas alquiladas en el negocio en la cima de la loma, partimos a recorrer la isla comenzando desde el puerto Backagården y siguiendo la costa por el lado norte. Hicimos una parada en el puerto del lado oeste, Kyrkkebacken, donde vimos entrar y salir algunos yates y veleros. También paramos en la iglesia al tope del puerto a disfrutar del panorama desde la altura antes de continuar en búsqueda de un lugar para comer, lo que no fue facil, pero finalmente encontramos un café y restaurante ecológico que tenía unas pizzas fantásticas. Un dato curioso era que el único utensilio que nos dieron para comerlas fueron un par de tijeras. Comimos al aire libre en el jardín del lugar mientras comenzaba a desmejorar el tiempo. Luego de devolver las bicicletas bajamos caminando al puerto y compramos helados a la espera del ferry. A las tres de la tarde zarpamos para Landskrona y por suerte encontramos el auto intacto. Dejamos a Johanna en Lund y luego regresamos a casa. Poco más tarde cayó un chubasco en Malmö.